Encontrar un buen abogado especializado en concursos de acreedores podría ayudarle a evitar muchos disgustos
Después estar luchando para solucionar sus deudas, se ha planteado la posibilidad de solicitar un concurso de acreedores: es el momento de buscar un abogado especializado en concursos de acreedores, pero ¿a cuál elijo?
¿Dónde encuentro un abogado especialista en concursos de acreedores?
Se trata de una materia muy compleja por lo que es imprescindible ser asesorado por un abogado experto en concursos de acreedores. Si no conoce uno, estas son las vías por las que empezar a buscar
Referencias personales
Si un amigo o conocido ha pasado por un procedimiento concursal, podrá contarle su experiencia. Y si quedó satisfecho con su abogado concursalista, éste puede ser un buen punto por el que empezar. Lo que no recomendamos es el “cuñadismo”, el recurso a un abogado familiar o conocido que realmente no tiene experiencia en procesos de reestructuraciones e insolvencias.
Referencias de otros abogados
Entre los abogados generalmente hay conocimiento del “quien es quien” en la profesión a nivel local. Un abogado con el que realmente se tenga confianza, puede proporcionar el contacto con un abogado experto. Y en caso de no conocerlo directamente, tiene fácil acceso a otros compañeros que puedan aportar información sobre el mismo.
Directorios
En Internet hay multitud de directorios que proporcionan listas de abogados en su zona. Normalmente no le cobran al cliente por proporcionarle los contactos de los abogados. Los directorios de abogados se mantienen gracias a los pagos que hacen los abogados para aparecer en los mismos. La cuestión radica en que generalmente no hay filtros de calidad. El abogado indica sus especialidades, abona sus cuotas y aparece en el directorio. Pero en la mayoría de los casos, no hay un verdadero proceso de selección o de comprobación de la experiencia y conocimiento en la materia.
Búsqueda en Internet
A través de buscadores como Google podrá encontrar abogados especializados en concursos, que habitualmente publican artículos sobre la materia como sentencias, opiniones doctrinales o comentarios sobre la normativa concursal. Esas publicaciones son generalmente un buen indicador de la experiencia y conocimiento sobre la materia.
Las tres “E’s” para encontrar un abogado especializado en concursos
La selección de un abogado especializado en concursos gira en torno a las tres “E’s”: Emolumentos, Experiencia y Empatía.
Emolumentos del abogado concursal
No debe tener ningún reparo en preguntar cuánto le va a costar el asesoramiento, qué cuestiones comprende y qué es lo que no está incluido.
No necesariamente el abogado más caro le dará un mejor asesoramiento, pero es recomendable evitar los despachos “low cost” en una materia de la que puede depender el resto de su vida. Este tipo de despachos se suele caracterizar por un elevado presupuesto en publicidad y llevar un gran número de casos cada mes. Es muy frecuente que en esos casos, gran parte de las gestiones se lleven por empleados que no son abogados especialistas en concursos, con el consiguiente riesgo.
Los honorarios dependerán fundamentalmente de la complejidad del caso, con la correlativa necesidad de tiempo de trabajo. Para que un presupuesto sea razonable, se deberán presupuestar distintas alternativas, según surjan o no complicaciones. Es recomendable que se establezcan unos hitos con sus correspondientes honorarios. Una buena solución consiste en que se facturen por horas las cuestiones que puedan exceder lo inicialmente presupuestado. De esta manera, el presupuesto no es “holgado” en perjuicio del cliente, ni es tan ajustado que el abogado “se pille los dedos” al presupuestar, en detrimento de la dedicación y calidad del trabajo.
En cuanto a la forma de pago, es frecuente que se ofrezcan pagos periódicos de manera que el abono de los honorarios no suponga un nuevo problema añadido para el cliente.
En otra entrada bajaremos al detalle del coste de un abogado especialista en concursos.
Experiencia del abogado
Es importante evitar igualmente abogados con poca experiencia en la materia. Se trata de una materia muy compleja como indicamos en esta entrada. Un documento no presentado o fuera de plazo puede tener consecuencias graves. La regulación es muy cambiante y compleja. Además es una materia que trasciende lo puramente jurídico y necesita conocimientos de contabilidad, finanzas y negociación.
La profesionalidad es un requisito indispensable. Un abogado apasionado por la materia estará al día y tendrá un profundo conocimiento sin que le suponga un esfuerzo.
Esa experiencia y conocimiento le permitirá asesorarle en las alternativas que se plantean en los procedimientos concursales.
Empatía
El abogado experto en concursos, además de tener un profundo conocimiento en la materia, debe entender las necesidades y preocupaciones del cliente. El cliente está sufriendo una situación muy desagradabke y lo último que necesita es un abogado que le reproche o que simplemente ignore sus preocupaciones. La comunicación con el abogado tiene que ser fluida y el cliente debe encontrarse cómodo en su relación con el mismo. Se debe percibir que el abogado concursal le escucha y le entiende.
La accesibilidad del abogado es importante. Si es difícil contactar con el abogado o los correos se responden con retraso, debe saltar la señal de alarma.
¿Despacho grande o pequeño?
Sobre esta cuestión, debemos indicar que en el ejercicio de la abogacía apenas hay economías de escala. Un gran despacho con cientos de abogados, no lleva necesariamente los casos mejor que uno pequeño. Lo que sí marca la diferencia es la especialización y la dedicación. La especialización, en cuanto a que el abogado que lleve su caso, tenga un amplio bagaje en casos similares. Y la dedicación en cuanto a que su caso lo lleve personalmente su abogado especializado en concursos y no personal con menor cualificación.
Las fases para seleccionar un abogado especialista en concursos de acreedores
El proceso para encontrar un abogado experto en concursos de acreedores tiene tres fases.
La primera fase será seleccionar al menos tres candidatos que reúnan los requisitos que hemos visto. En esta fase, no descarte a un buen candidato porque le pida el pago de la visita. Ese pago se puede considerar a cuenta de la futura minuta. Los mejores abogados tienen normalmente más casos de los que pueden llevar personalmente.
La segunda será mantener una entrevista y pedirles presupuesto a los que resulten más prometedores.
Algunas de las cuestiones que como mínimo debería plantear son, el número de concursos de acreedores que ha llevado, el tamaño del despacho, si llevará personalmente el caso o lo harán abogados de su equipo y por último, el presupuesto que le aplicarán.
La tercera será la toma de la decisión. Y una vez tomada la decisión, es necesario firmar una hoja de encargo. En esta, se recogen todos los términos de la relación entre abogado y cliente. Cuanto más detallada, mejor.
Un último consejo
Póngase en marcha ya. No lo posponga. En estas situaciones, retrasar la toma de decisiones no mejora la situación, sino todo lo contrario. Se sentirá aliviado cuando empiece a encarrilar los problemas con la ayuda de un abogado especializado en concursos de acreedores.